Con mucha motivación y con la intención de encadenar mi proyecto para este año volvimos por los fueros, pero la realidad me dijo: " chaval a entrenar más continuidad", es que no pudo ser. Me sentía muy fuerte físicamente y mentalmente, pero como siempre mi mente se adelanta a los acontecimientos y yo ingenuo creía que me la podía llevar.
La bailando es la bailando, un muro muy, muy desplomado que da miedo solo de mirarlo; pero no pasa nada, seguro que con el camino que llevo, entrenar mucho y escalar con el sensei, algún día caerá y sino tampoco pasa nada, Lo importante es que aprenda y disfrute en la roca que es lo que me llena y no el grado. Mientras que la línea sea bonita que importa el grado.
Volvimos a equipar otra línea que para mí es la más bonita hasta ahora, una placa con movimientos largos y con canto. Akuracy se llama, posible 6c/+, el tiempo lo dirá. Gracias sensei por acordarte de mí.
Sandrita,sandrita, cada finde escala mejor, pero a su ritmo, la pobre no tiene tiempo para entrenar y solo puede los fines; bastante tiene con aguantar mi impaciencia, te quiero.
Y la sorpresa!!! nos conjuramos todos para que el sensei no se enterara de nada, y por la noche por arte de magia en el bar aparecieron unas manitas para taparle los ojos, era su ángel, mereció la pena solo con ver su cara.
Un abrazo, y a muerte.
1 comentario:
Nos vemos en el infinito para comernos la luna a cucharadas.
Te quiero!
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